Te contamos todos los entresijos en la recomendación de compra de ocasión del Ford Mustang (S550). La sexta generación del Mustang.
El Ford Mustang es el icono de los años 60 que creó su propia clase: los Pony Cars. Capó largo, trasera corta. Una de las explicaciones del nombre está relacionada con el avión de combate P-51 Mustang que causó furor en la Segunda Guerra Mundial.
Los competidores fueron el Chevrolet Camaro y el Dodge Challenger, pero el Mustang original es el auténtico. Dato curioso: el coche se llamaba Mustang en todas partes menos en Alemania, donde el nombre pertenecía al fabricante de camiones Krupp… Allí, el Ford Mustang se llamó T5 hasta finales de los 70… de todas formas, suena menos cool.
Un par de datos más. El Ford Mustang salió a la venta en Estados Unidos en 1964 por menos de 2.400 dólares. Vendió 100.000 unidades al cabo de tres meses y 418.000 al cabo de un año. Después de 18 meses, Ford alcanzó la marca del millón.
Se ofrecía como coupé de dos puertas, Fastback de tres puertas y descapotable de dos puertas. Ya era posible embarcarlo en un sencillo seis cilindros de apenas 100 CV, que luego corría hasta donde tu cartera quisiera… como un Shelby, vestido totalmente a tu gusto. Su éxito instantáneo fue enorme.
Pero ese Mustang de los años 60 es el que no vamos a enfocar hoy. Echamos un vistazo más de cerca no a la primera, sino a la sexta generación del Ford Mustang (S550) en este consejo de compra de Blog de coches Ocasión.
En sí mismo no es una revolución en comparación con su predecesor, pero es el primer Mustang que aparece en la lista de precios en todo el mundo. En los Países Bajos, con un cuatro cilindros, así como un V8 de 5,0 litros que es básicamente invendible debido al impuesto sobre las emisiones de CO2. Un mínimo lavado de cara en 2018 vuelve a inclinar ligeramente el modelo con faros LED más deportivos, un V8 más potente y una transmisión automática de diez velocidades.
Antes de la sexta generación, Ford opinaba que el coche no era lo suficientemente sofisticado para Europa, pero ahora Ford apuesta por los coches del mundo. No sólo nos trajo el Ford EcoSport de Sudamérica, sino que en 2015 también lo hizo el Ford Mustang S550 de Norteamérica. Cruzó el charco en una variante cerrada y otra abierta.
Como tal, el Ford Mustang (S550) usado es conocido por ser razonablemente fiable, pero todavía destacamos algunas áreas de preocupación para usted.
Puntos de interés
Si quieres comprar un Ford Mustang (S550) de segunda mano, tenemos algunos consejos para ti. La fiabilidad en sí misma es un orden, pero tómate un momento para revisar la lista de problemas del Ford Mustang (S550) en este consejo de compra de ocasión.
En primer lugar, un consejo general. El Ford Mustang es sobre todo un coche importado de Estados Unidos. Muchos de estos coches llegan al barco como coches dañados y son remendados aquí. Con daños menores y reparados adecuadamente, esto no es un problema, pero vea lo que puede encontrar sobre el coche en cuestión. A menudo se puede encontrar el lote de subasta del coche dañado en particular en el número de chasis.
Carrocería e interior
Empezamos por la carrocería. La pintura es a veces de mala calidad. Compruébelo cuidadosamente, el control de calidad en la fábrica en América es de un nivel diferente al que estamos acostumbrados aquí. La alineación de los paneles también tiende a ser descuidada. Los paneles rozan unos con otros o hay huecos.
Es un coche potente, por lo que también conviene comprobar cuidadosamente si ha sufrido daños, por ejemplo, a causa de un accidente. Levante la chapa inferior del maletero y, si puede, eche un vistazo detrás de la tapicería. Mira qué aspecto tiene la carrocería allí y si ves algún daño en la parte trasera. El coche tiene tracción trasera y no todo el mundo lo domina igual de bien.
Compruebe los bajos y los pasos de rueda, especialmente en los coches holandeses. La salmuera no es la mejor amiga del Ford Mustang. El tratamiento anticorrosión de fábrica podría haber sido más exhaustivo para nuestros estándares. Compruebe si hay óxido incipiente en los bordes del capó y los pasos de rueda. Son puntos débiles.
¿Buscas un descapotable? Levanta el capó hasta la mitad. Si la capota está torcida, es probable que algo no vaya bien… Puede que los paneles no estén a plomo o que el coche haya recibido un golpe. Sería conveniente investigar un poco más.
Comprueba en las ventanillas traseras y en las puertas si ves restos de agua que haya entrado en el coche. Esto sigue siendo habitual. Comprueba que las ventanillas se abren y cierran correctamente. El agua en las puertas hace que no funcionen con suavidad.
El interior. Bueno, como vemos a menudo con los americanos no un aspecto inmediatamente premium. Interruptores de plástico plateado y materiales resistentes. No hay que olvidar que en los EE.UU. el coche cuesta mucho menos nuevo que aquí. Especialmente con la penalización de CO2 que el coche recibe aquí desde casa.
Muchos propietarios en línea son un poco decepcionado con la calidad de construcción del interior de todos modos, y los primeros ejemplos son propensos a sonajeros, chirridos y vibraciones en la cabina. Si usted está en el mercado para un primer Ford Mustang (S550) prestar atención a eso. Después del lavado de cara, las quejas sobre los traqueteos son mucho menores y el coche también se siente un poco más lujoso.
Tren de rodaje
La suspensión es de muelles americanos. Los caballos desatados en las ruedas traseras son demasiado para la suspensión. La mala alineación de fábrica tampoco ayuda. Comprueba la alineación cuando conduzcas, tiene un efecto excesivo en el manejo del Ford Mustang (S550).
Ponga el oído en los rodamientos de las ruedas traseras. Son propensos al desgaste y si los oyes durante la prueba de conducción, es que hay que cambiarlos.
Los frenos están bien. Compruebe que las pastillas de freno no chirrían en exceso. Un Ford Mustang muy usado en ocasiones puede seguir teniendo vibraciones en el pedal al frenar. Los discos y/o las pastillas están entonces sucios y necesitan ser sustituidos. Así que asegúrese de probar el coche en la prueba de conducción.
Transmisión
La transmisión manual de seis velocidades que se encuentra en el S550 solía tener una mala reputación y, a veces, abandonaba el fantasma. Afortunadamente, para la sexta generación, esto está mucho mejor hecho y se reportan muchas menos quejas.
Los primeros ejemplos tenían un problema con la transmisión manual y el arranque del motor debido a un interruptor de pedal de embrague dañado. Esto normalmente debería haber sido reemplazado si usted está en el mercado para un Ford Mustang temprano (S550) ocasión ahora.
Tras el lavado de cara de 2018, la caja de cambios manual se sustituyó por una variante más moderna con anillos de sincronización más grandes y un embrague de doble disco. En este caso, a veces se siguen reportando problemas con las horquillas de cambio de aluminio que se rompen en tercera y cuarta marcha. Poco después de su introducción, Ford corrigió este defecto, pero si pruebas un modelo de principios de 2018, comprueba si cambia con suavidad.
Lo importante con la transmisión manual es comprobar que el embrague no patina. Especialmente si el propietario anterior era un conductor prutch, puede haber matado el embrague. Sin embargo, se puede sentir de inmediato, especialmente con el V8. Sustituir el embrague es un trabajo caro que preferirías no tener que hacer.
Antes del lavado de cara, el Ford Mustang (S550) tiene una transmisión automática de seis velocidades. Compruebe que el cambio automático no hace ruido al pasar de punto muerto a marcha adelante o marcha atrás. Si es así, es necesario sustituir la brida delantera de la transmisión.
Durante la prueba de conducción, preste atención a las vibraciones, zumbidos y ruidos. Especialmente entre 40 y 100 kilómetros por hora. Esto podría indicar un eje de transmisión desequilibrado o cojinetes de rueda o neumáticos desgastados. En Internet también se informa de diferenciales ruidosos.
Los primeros Mustang de sexta generación tenían ocasionalmente problemas con el radiador de aceite. Cuando se agrieta, el aceite se escapa a la calle o a otras partes calientes. Fugas internamente también es posible, entonces el aceite se ejecuta en el sistema de refrigeración y luego se detiene.
El Ford Mustang (S550) es propenso al tic-tac del motor V8 de 5.0 litros. Se oye principalmente cuando el motor está al ralentí. El tic-tac leve es causado por cables sueltos y escudos térmicos, pero a menudo hay un ruido en la parte inferior que suena como una máquina de escribir. Parece ser más común cuando se acaba de cambiar el aceite. La explicación oficial de Ford es que no hace daño, ya que no pudieron encontrar una causa. Así que no te preocupes.
Electrónica
Toda la electrónica parece razonablemente bien hecha. Las luces de entrada en los retrovisores exteriores todavía a veces quieren romper debido a la humedad, y a principios de 2019 hubo una llamada a revisión debido a un riesgo de incendio debido a que el arnés de cableado de la batería estaba demasiado cerca del colector de escape. Aislamiento extra fue la solución. Comprobemos si esa llamada a revisión también se llevó a cabo con pulcritud.
Probar el aire acondicionado es, por supuesto, una puerta abierta al tomar una prueba de conducción. También sabio con el Ford Mustang ocasión, porque el condensador de aire acondicionado a veces causa problemas con esta generación.
Lo que también encontramos en Internet son calefactores que se quedan atascados en el ajuste más caliente. Así que prueba no sólo la refrigeración, sino también el calentador en el ajuste más alto. Y si entonces quiere enfriar de nuevo.
El sensor de temperatura exterior situado detrás de la rejilla es propenso a averiarse. ¿Y qué? se podría pensar. Entonces no sabemos la temperatura exterior… Pues bien, si ese sensor está estropeado, el airco tampoco funcionará correctamente, ya que también necesita la entrada del sensor. Por ejemplo, si tu airco bombea mucho aire caliente dentro del coche en un día caluroso, tu airco podría estar estropeado, pero este sensor también podría ser el culpable si piensa que hace 10 grados fuera.
Compruebe si funciona la tercera luz de freno. Si no funciona, probablemente tampoco funcionen la radio ni la cámara de marcha atrás. Todos están en la misma conexión. Esa tercera luz de freno es una primera comprobación fácil si todo funciona.
A veces, el coche no reconoce la llave. Aun así, puedes arrancar el coche. Retira la alfombrilla de goma del portavasos central y coloca allí la llave. El coche arrancará. Pon una pila nueva en la llave lo antes posible.
Motores
Tras el lavado de cara de 2018, el V8 de 5 litros se mejoró con camisas recubiertas de plasma, mayor relación de compresión y un límite de revoluciones más alto.
Mientras que el 2.3 te engaña con el sonido del altavoz, el V8 tiene que crear la banda sonora por sí solo. Después del lavado de cara, el GT añadió una válvula en el escape que emite esa banda sonora bastante bien y es ajustable a través del menú. Si quieres hacer ese ruido, elige un GT posterior a 2018, o ponle un escape posventa, por supuesto.
Puede que también conozcas el 2.3 Ecoboost del Ford Focus RS. Los primeros ejemplares entregan 317 CV en el Ford Mustang (S550), tras el lavado de cara sólo 290 CV. Esto es para cumplir los requisitos internacionales de emisiones.
La junta de culata del 2.3 EcoBoost puede ser un problema. Reportado más a menudo. Así que busque un nivel bajo de refrigerante, olor dulce y humos del escape. Un motor al ralentí áspero también puede ser un síntoma.
Tenga cuidado al comprar un Mustang. Se juega mucho con él. El coche puede manejar fácilmente más potencia que los caballos con los que viene de fábrica. Especialmente el V8. Tenga cuidado cuando compre un Mustang de 700 u 800 CV. A ver si puedes averiguar quién es el responsable de las modificaciones y si se hicieron bien.
En EE.UU. también estaba disponible un V6 de 3,7 litros, que también puede encontrarse a través de importaciones grises. A veces también aparece un V8 de 5,2 litros. Ten en cuenta que no son coches holandeses originales. Así que no tendrás el apoyo oficial ni la garantía en nuestro país.
Gasolina
2.3 EcoBoost de cuatro cilindros en línea 317 CV (después de 2018 290 CV)
3.7 V6 304 CV
5.0 V8 421 CV
5.0 V8 GT 421 CV (hasta 2018)
5.0 V8 GT 449 CV (a partir de 2018)
5.0 V8 Mach 1 460 CV (a partir de 2021)
Shelby GT350 533 CV
Shelby GT500 771 CV
Hoy conducimos un Ford Mustang 2017 (S550) Fastback con el motor 2.3 EcoBoost que nos prestaron en la Ford Broekhuis de De Bilt. ¿Buscas vehículos de ocasión? Encuentra tu próximo coche en Crestanevada.